El PP vasco se ha marcado como objetivo la lucha contra el cambio climático y para ello presentará batalla por tierra, mar y aire, tal y como ha anunciado en la Comunicación sobre la defensa del medio ambiente vasco en la Convención celebrada por los populares en Vitoria.
Esa lucha pasa, entre otras medidas, por una apuesta firme por las energías renovables, por la limitación de pesticidas convencionales, el uso sostenible de los espacios naturales, la lucha contra los plásticos y la utilización de energías procedentes del entorno marino, así como por la reducción de emisiones de CO2 o la restricción del uso del automóvil en favor de una movilidad sostenible.
Para que las políticas públicas sean lo más eficiente posibles tienen que enfocarse, principalmente, en entornos urbanos porque las ciudades son las principales generadoras de contaminación, también en el País Vasco, en este sentido se ha puesto en valor la experiencia y trayectoria del PP que logró que Vitoria fuera nombrada capital verde europea.
Con respecto a estas políticas, que deberían ser desarrolladas por el Gobierno vasco, el PP ha lamentado la inacción del Gobierno de Urkullu que se comprometió al inicio de la legislatura a remitir antes de mayo del 2019 un Proyecto sobre Medio Ambiente, Cambio Climático y Conservación de la Naturaleza, pero no sólo no lo ha hecho, sino que ha optado por dividirlo por secciones, dada su incapacidad para abordarlo en su totalidad, y, a día de hoy, no se ha recibido documentación alguna.
Esta actitud contrasta con las cifras recogidas en la Comunicación sobre el grado de preocupación de los vascos con respecto al cambio climático ya que un 80% de los vascos se muestra preocupado por este problema y un 90% piensa que el Gobierno vasco debe tener objetivos ambiciosos en la lucha contra él.
En esta ponencia se han propuesto medidas como la prohibición de dispensar envases de plástico no reconvertible, reducir el uso de los coches en los centros urbanos, la sustitución de pesticidas convencionales por biopesticidas, el fomento de una agricultura eficiente, desde el punto de vista económico y medioambiental, el uso del coche eléctrico y la bicicleta, aumento de la tasa de reciclaje, implantando un sistema de retorno de envases que gratifique al consumidor, o el fomento el uso de energías renovables en los hoteles vascos.
En el ámbito privado, el PP vasco ha propuesto la puesta en marcha en cada una de las capitales vascas de un Climate BIC (business incubation Center), tres incubadoras privadas con participación pública que, en el caso de Bilbao estaría especializada en la calidad del aire, en el de Vitoria en las energías renovables, mientras que San Sebastián se centraría en el mar y su conservación.
Consulte aquí la Comunicación completa: “Cambiar el cambio. Defensa del medio natural vasco”